El 60% de los MIR quiere ampliar su tiempo de residencia

La pandemia de coronavirus ha impactado contra los sistemas sanitarios y los profesionales que los conforman, que han trabajado a destajo para combatir al nuevo virus. También los médicos en formación, quienes han tenido que primar su faceta laboral para hacer frente a la emergencia sanitaria. Por ello, las Vocalías Nacionales de Médicos Tutores y Docentes y de Médicos y Formación de Empleo Precario de la Organización Médica Colegial (OMC) han analizado la situación de la Formación Sanitaria Especializada tras la crisis del Covid-19.

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El primero en tomar la palabra ha sido Serafín Romero, presidente de la OMC, quien ha subrayado que «el escenario Covid ha afectado a la formación», tanto que desde la Organización Médica Colegial ha debido pronunciarse en varias ocasiones durante la pandemia para defender a los médicos en formación. «Es importante que sea la propia profesión quien haga el diagnóstico y determine las terapias«, ha afirmado Romero, haciendo  hincapié en que sean los médicos en formación quienes aporten su experiencia.

Por su parte, Domingo Antonio Sánchez, representante Nacional de Médicos Jóvenes y promoción de Empleo, ha detallado el análisis que ha realizado la OMC, ha advertido que la FSE «se encuentra en crisis» y que las normas que se han adaptado por la crisis del Covid han supuesto «una prueba de estrés». 

Tal y como ha detallado Sánchez, la mitad de los MIR han visto interrumpido su programa formativo para trabajar contra el Covid. También el 50 por ciento afirma haber tenido que incrementar su número de guardias por causa de la crisis sanitaria o se ha visto obligado a aumentar su jornada laboral, el 70 por ciento de ellos sin recibir una remuneración por ello. 

Además, el 97 por ciento de los MIR que han participado en el estudio señala haber perdido horas de formación en quirófano. El mismo porcentaje afirma que han visto mermada su formación. Un porcentaje más alto, del 98 por ciento, refiere que su desarrollo laboral durante la pandemia ha supuesto un impacto en su estado emocional. 

El 75 por ciento de los participantes también ha percibido una mayor carga de trabajo y el 60 por ciento cree necesario ampliar el periodo de residencia para compensar la formación perdida por culpa de la pandemia.

Como propuestas de mejoras, los MIR han propuesto un plan de acción que retome las auditorias formativas a nivel nacional,  la creación de una comisión ministerial y de un Libro Blanco de la FSE. También, un aumento de la participación de los representantes de los residentes en la toma de decisiones, y la prórroga del contrato MIR según las deficiencias formativas. 

Vicenç Martínez, Director de Ordenación Profesional del Ministerio de Sanidad, quien ha remarcado sus más de 40 años trabajando en un hospital, donde ha sido tutor de residentes, se ha mostrado favorable de impulsar dichas auditorías junto con las CCAA.

«Hay mucho peso asistencial en los residentes y poco esfuerzo, a veces, en los estatutarios», ha remarcado Martínez, quien ha abogado por «la inspección de las instituciones». «Han de ser oportunidad de mejora», ha instado el director de ordenación Profesional, que ha llamado a «revisar la vivencia de los residentes» y ha defendido una inspección «continuada». 

«El eslabón más débil estaba muy afectado por la pandemia de Covid-19», ha afirmado Francesc Feliú, Representante Nacional de Médicos Tutores y Docentes, quien ha confirmado la «mala situación» de la FSE durante el Covid y ha dado datos sobre la percepción de los propios tutores. 

Así, ha subrayado que el 80 por ciento de los tutores cree que la formación de los residentes ha sido peor durante la pandemia  y el 90 por ciento de los encuestados ha señalado que no se han realizado sesiones clínicas de formación a los residentes. Además, el 70 por ciento ha advertido que no han operado u operado mucho menos.

En cuanto a la calidad de supervisión de los tutores, esta ha sido percibida con una menor o mucho menor en un 65 por ciento de los casos. Además, respecto a la capacidad de reorganización de rotaciones, más del 50 por ciento de los tutores ha señalado que esta capacidad ha sido nula y que lo ha asumido el  jefe de servicio, quie no tiene competencia al respeco.

«Los tutores no somos inmunes y la pandemia también nos ha afectado. El 75-80 por ciento ha manifestado un peor estado de ánimo», ha advertido el representante de los tutores. Además, un tercio de ellos se ha planteado renunciar a ser tutor, tal y como ha señalado Feliú.

En cuanto a las propuestas planteadas, el representante de los tutores ha subrayado la necesidad de intentar reducir la atención telefónica, lo que «choca con la política actual», porque se ha multiplicado por 10 este tipo de servicios. También abogan por «empoderar al médico tutor» y que tenga más tempo para estar con sus residentes; así como incrementar el número de tutores y disminuir la ratio, situada ahora por cinco residentes por tutor.